Se nos acaba mañana el verano en el hemisferio norte y vamos a despedirlo de la misma forma que lo recibimos; con un sencillo diy realizado a partir de conchas marinas recogidas en la playa.
Partimos de un marco de fotos sencillo de esos con profundidad y que dejan un espacio vacío entre el cristal y la lámina de la foto. De esta forma, sobre el paspartú podremos colocar también alguna decoración con relieve. En este tipo de marcos el cristal suele ir sujeto con unas tacos de madera así que normalmente no va a poder extraerse. Lo cubrimos para que la pintura o el pegamento no lo estropee y pegamos (rellenándolas con adhesivo de montaje) unas cuantas conchitas, allá donde queramos.
Sobre el paspartú pegamos un nudo marinero, un nudo de calabrote doble o nudo de carraca y otra almejita, no lo vamos a recargar más. El nudo de calabrote lo realizamos con dos trozos de cordel, siguiendo el esquema de la foto pero solo los pasos 1 y 2, no apretamos demasiado y lo dejamos con holgura que es como el nudo queda bonito.
El marco es negro y no nos interesa este color así que le damos una primera capa de pintura blanca. También sobre las pequeñas conchas…
Lo pintamos toscamente, nos interesa un acabado rústico, como una barca marinera que ha sufrido las inclemencias de la intemperie. Una vez seca la pintura le damos una segunda capa de pintura azul. Damos pequeños brochazos sin que lleguen a cubrir toda la superficie, dejando que el blanco del fondo se vea por diversas partes y una vez seco, montamos el paspartú, la foto, y aquí tenemos el resultado: nuestro marco más marinero con la foto del verano para recordarlo.
¡Bye bye verano! ¡Bienvenido seas otoño!
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